Últimas noticias sobre la situación de Jean-Marc Rouillan y de Georges Cipriani


La audiencia de apelación en la que se considerará la demanda de semilibertad de Jean-Marc Rouillan y el recurso en contra de la fiscalía tendrá lugar el jueves 31 de marzo, aunque se prevé que la decisión se demorará todavía algún tiempo. Georges Cipriani cumple en abril un año de semilibertad. La audiencia de su petición de libertad condicional se celebró el pasado 10 de marzo. La decisión se hará pública el próximo jueves 24 de marzo. El colectivo solidario “Ne laissons pas faire!” llama a continuar asistiendo a las concentraciones frente a la dirección de la administración penitenciaria en París (carrefour rue de la Verrerie-rue du Renard. Paris 4e-Métro L1/L11: Hôtel-de-Ville) y a continuar movilizados frente a los intentos de manipulación de la opinión pública en contra de los presos de Action Directe.


"SE PUEDE DISOLVER UNA ORGANIZACIÓN; NO SE PUEDE DISOLVER EL MOVIMIENTO REVOLUCIONARIO"
El 26 de febrero, Jean-Marc Rouillan empezó su vigésimo quinto año en detención. Detenido en 1987 al mismo tiempo que sus compañeros Nathalie Ménigon, Joëlle Aubron y Georges Cipariani, es el último que queda en prisión. El 16 de febrero de 2011, el Tribunal especial de aplicación de las penas le otorgó una medida de semi-libertad. En seguida, el ministerio fiscal recurrió. Este mismo tribunal, reunido el mismo día, pronunció una decisión similar para Jon Kepa Parot. Esas ultimas semanas, dos comisarías y tres puestos de policía de la región parisina habrían recibido una carta firmada “Acción Directa”. No se necesita más para excitar el espectro del terrorismo y, ¿por qué no?, justificar sobre la marcha el mantenimiento en prisión de Jean-Marc Rouillan. La cosa está cosida con hilo gordo, pero, como se dice: “Calumnia que algo queda”… 
Quien se acuerda del grupo Acción Directa lo asocia inevitablemente al nombre de las cuatro personas que componían lo que los medios de comunicación presentaron como el “núcleo duro”. Y dentro de ese cuarteto, el de Rouillan figura de modo preponderante en la memoria colectiva.
Nacido en 1952, está aún en el instituto cuando se compromete en el combate político. Vive entonces en Tolosa (de Occitania), ciudad cosmopolita y popular, poblada entre otros de numerosos republicanos españoles que habían huido de sus tierras después de su derrota militar. De ahí viene su sobrenombre de “Capital de la España republicana”. Muchos de ellos se habían integrado después en la Resistencia francesa contra el ocupante nazi durante la Segunda Guerra Mundial, antes de sufrir esa segunda traición: una vez vencidos los nazis, nadie hizo nada para luchar contra Franco, no más que cuando los combates causaron estragos en las riberas del Ebro o en Catalunya.

Tolosa
Jean-Marc Rouillan se compromete en la lucha antifranquista, antiimperialista, antiautoritaria, asamblearia, autónoma… Está en todos los frentes, y nada podrá detener su rabia por acabar con este mundo demasiado injusto y  no igualitario. Si el eslogan “Sex drug and rock ‘n’ roll” es claramente de su generación, Mayo del 1968 también lo es, con los debates tumultuosos, las manifestaciones, las ocupaciones y la guerrilla urbana que acarreó. Luego el proceso de Burgos y su repercusión internacional. Primer intento de acción armada: contra el consulado de España en Tolosa. Un fracaso (“¿Seguro que has encendido la mecha?”, recuerda en una de sus novelas). Primera “misión”, aún bastante confusa: cita en Baiona…
Jean-Marc Rouillan empieza a viajar “al interior”, dentro de la España franquista. Sus primeras citas tienen lugar en Donostia, lo que le conllevará el apodo de “Sebastián”, y poco tiempo después de “Sebas”, que conservará durante sus largos años de clandestinidad. Para el pequeño núcleo del cual forma parte, ser un grupo de apoyo a los “camaradas vascos” le resulta al poco tiempo insuficiente: deciden entonces crear su propia estructura armada. Oriol Solé Sugranyes era parte de ese grupo; él que se evadirá algunos años mas tarde de la prisión de Segovia, durante la famosa “Fuga de Segovia”, pero resulta muerto al día siguiente, 6 de abril de 1976, por un tiro de la Guardia Civil, en los alrededores de Auritz (Nafarroa), cuando los escapados intentaban cruzar la frontera por el monte.

El MIL
Oriol Solé usaba ya la sigla “1000” en ciertos documentos, al cual añadía un dibujo resultante de la revista cubana Tricontinental, que consistía en cinco fusiles alineados. El nombre evolucionó a “Comando 1000”, y por fin a “MIL”, el nombre que la historia recordará, “Movimiento Ibérico de Liberación”. El adjetivo “ibérico” les gustaba porque evocaba la legendaria FAI, pero también el DRIL, grupo armado antifranquista que había actuado de 1960 a 1964 (una de sus bombas mató a la pequeña Begoña Urroz Ibarrola, que está ahora considerada por el poder como la primera víctima de ETA – ver Gara del 12 de febrero de 2010 y 18 de diciembre de 2010 -).
El MIL actuará sobre todo en Catalunya, entre enero de 1971 y agosto de 1973. Sus objetivos: desgastar las fuerzas de represión, apoyar las luchas radicales, apoyar la creación de grupos autónomos, crear aparatos de información y propaganda. Sus medios: expropiaciones, acciones a la bomba, publicación de libros (ediciones Mayo 37). La figura que recordamos de este grupo es por supuesto Salvador Puig Antich, detenido el 15 de septiembre de 1973 en Barcelona, y ejecutado mediante garrote vil el 2 de marzo de 1974 en la Modelo. Por esos hechos, Jean-Marc Rouillan fue juzgado en diciembre de 1973 por un tribunal militar español, que le condenó a muerte en rebeldía.

Los GARI
A partir de la detención de Puig Antich, se constituyen los GARI (Grupos de Acción Revolucionaria Internacionalistas), para dar apoyo a los camaradas encarcelados (Oriol Solé Sugranyes y Josep Lluis Pons Llobet, por ejemplo, están a la espera de sus juicios) y llamar la atención sobre la situación que padece el estado español. El 28 de febrero de 1974, el coche del canciller de España en Tolosa es ametrallado. La primera acción de los GARI. En marzo tiene lugar una serie de atentados a la bomba. Pero el más conocido, el 3 de mayo secuestran al director del Banco Bilbao. Las reivindicaciones: la supresión de la pena de muerte en España y la liberación de los presos enfermos. El 22 de mayo, liberan al banquero, pero dos militantes son detenidos en París: Lucio Urtubia y su compañera, Anne. El Banco Bilbao había pagado un rescate de 3 millones de francos (mas de 450000 euros), pero la policía dio con el dinero durante otros arrestos.
Jean-Marc Rouillan, él, es detenido en París el 3 de diciembre de 1974 por sus actividades en los GARI. Recobra la libertad solamente en mayo de 1977, al mismo tiempo que otros presos de los GARI. También en 1977 un decreto real de Juan Carlos le amnistía en el estado español, pero en contrapartida se le aplica una prohibición de estancia en el territorio español, medida todavía hoy en vigor.
Numerosas acciones son reivindicadas por los GARI (o por algunas de sus variantes, como el GAROT, “Grupo de Acción Revolucionaria Ocasionalmente Terrorista”) hasta enero de 1975. En noviembre de 1977, el nombre de los GARI aparece por última vez durante una serie de atentados antinucleares contra instalaciones de EDF (Electricidad de Francia).  Se lleva acabo con la participación de militantes resultantes de los Núcleos Armados Para la Autonomía Popular (NAPAP), otra organización aparecida en 1976.

Acción Directa
Esta serie de atentados dibuja sin duda el acercamiento entre esas dos organizaciones, ya que está reivindicada por la CARLOS (Coordinación Autónoma de los Rebeldes en Lucha Abierta contra la Sociedad), una “coordinación político-militar dentro del movimiento autónomo”. Coordinación de la cual una parte de sus miembros cogerá el nombre “Acción Directa” en 1979, definida como una “organización de guerrillas”. Su objetivo es luchar contra el imperialismo capitalista, los símbolos del poderío del estado, la gran patronal y por la defensa del proletariado.
La primera acción reivindicada por Acción Directa (AD) tiene lugar el 1º de mayo de 1979: se trata del ametrallamiento de la fachada del CNPF (Consejo Nacional de la Patronal Francesa). Los atentados con explosivo siguen a partir de septiembre de 1979: contra los Ministerios del Trabajo, de la Salud, o la SONACOTRA (Sociedad Nacional de Construcción de Viviendas para los Trabajadores, que participa en la explotación de los trabajadores extranjeros).
El 13 de septiembre de 1980, Jean-Marc Rouillan y Nathalie Ménigon son detenidos en París, cayendo en una trampa tendida por la policía. Sin embargo, son amnistiados en septiembre de 1981 (al mismo tiempo que otros militantes de AD igualmente encarcelados), después de la llegada al poder de François Mitterrand. Las acciones siguen: ametrallamiento de la Misión Comercial Israelí, atentado contra la sede del FMI, del periódico de extrema derecha Minute… Finalmente, un decreto es publicado el 24 de agosto de 1982, en el que declaran la organización ilegal. La caza queda abierta.

La clandestinidad
En octubre de 1982, Jean-Marc Rouillan reacciona a esta ilegalización contestando a las preguntas de un periodista parisino: “Disolver Acción Directa es impedir la difusión de sus análisis, su expresión, es obligar a sus militantes a entrar en clandestinidad”. Y añade: “Se puede disolver una organización, no se puede disolver el movimiento revolucionario”. Con esta afirmación, Jean-Marc Rouillan sabe muy bien de qué está hablando: una sigla no es nada, sólo importa la acción.
Y continúa su combate con algunos compañeros que deben adoptar medidas de seguridad cada vez más estrictas. Atentados contra Ministerios, la Agencia Espacial Europea, la sede del Partido Socialista o de la Unión de la Europa Occidental… El 25 de enero de 1985, René Audran, director de Asuntos Internacionales de la Delegación General de Armamento, es ejecutado. Es la primera acción de este tipo llevada a cabo por AD. El 17 de noviembre de 1986 es el turno de Georges Besse, presidente director general de Renault, quien aplicó planes de despidos drásticos para “reestructurar” la empresa.
Ponen carteles en todo el estado francés con las fotos de los cuatro militantes buscados. Anuncian una recompensa de un millón de francos (mas de 150000 euros) por cualquier información. El arresto de los cuatro militantes se produce, tras cuatro años de batidas, el 21 de febrero de 1987, en un caserío de Vitry-aux-Loges, a 150 kilómetros al sur de París.

Las condenas y la prisión
El primer juicio por jurados (criminal) tiene lugar en enero de 1989. Hacen frente a una jurisdicción especial, formada sólo por jueces profesionales y sin ningún jurado popular. Esta decisión había sido tomada poco tiempo antes durante el proceso a Régis Schleicher, otro miembro de AD detenido ya en 1984, que tuvo lugar en 1986; había amenazado a los jurados, llevando a cinco de ellos a retirarse. El juicio fue aplazado, por falta de jurados populares. Al final, fue condenado a perpetuidad en junio de 1987, pero por un jurado profesional. Esta medida sigue en vigor hoy en día.
Los cuatro militantes de AD fueron condenados en 1989 a cadena perpetua, sin posibilidad del derecho a la libertad condicional hasta pasados 18 años. Otros juicios siguieron, hasta 1994. Durante este periodo, los “cuatro de AD” están en aislamiento total (solos tanto en la celda como en el patio, limitado a una hora al día). De 1987 a 1994, llevaron a cabo numerosas luchas, siendo varias de ellas huelgas de hambre, para obtener el fin del aislamiento, la mejora de sus condiciones de detención, su derecho a comunicar entre ellos, etc.
Una vez todos los juicios acabados, las dos mujeres fueron trasladadas juntas a la prisión de Bapaume, Georges Cipriani a la de Ensisheim, y Jean-Marc Rouillan al centro penitenciario de Lannemezan. Pero el aislamiento sí que produjo su efecto destructor, sobre todo en Georges Cipriani que fue ingresado un tiempo en una “unidad especial de psiquiatría”.
En 2004, Joëlle Aubron tuvo problemas de salud y fue operada en prisión de un tumor en el cerebro. La liberaron por razones médicas en junio de ese año, y falleció el 1 de marzo de 2006. Nathalie Ménigon tuvo varios accidentes vasculares cerebrales en detención, y le quedan secuelas dado que está parcialmente hemipléjica. Obtuvo su libertad condicional en agosto de 2008 y Georges Cipriani en abril de 2010. En cuanto a Régis Schleicher, está en libertad condicional desde el 26 de mayo de 2010.
Jean-Marc Rouillan obtenía un régimen de semilibertad en diciembre de 2007, combinado con múltiples condiciones, como la de “abstenerse de cualquier intervención pública relativa a la infracción cometida”. En septiembre de 2008 otorga dos entrevistas a la prensa, y una de ellas constituirá el pretexto para encarcelarle otra vez el 2 de octubre de 2008. Durante el año 2009, está ingresado en el hospital y se le diagnostica la muy rara enfermedad de Chester-Erdheim, que no se puede tratar en prisión. El 2 de febrero de este año, una audiencia ha tenido lugar en la prisión de Muret-Seysses donde está detenido para decidir sobre una nueva petición de libertad. El juez antiterrorista encargado de estudiar su caso se ha pronunciado el 16 de febrero a favor de su semilibertad a partir del 7 de marzo, pero el ministerio fiscal ha interpuesto una apelación ese mismo día. La decisión final se está esperando. Y mientras tanto, Jean-Marc Rouillan sigue luchando para obtener su liberación.
Mari Otxandi

Más información

Gran conocedor de la historia del movimiento popular y obrero, Jean-Marc Rouillan transmite desde hace 10 años esa memoria a través de numerosos libros, con el nombre artístico Jann-Marc Rouillan, algunos de ellos traducidos ya al castellano. Del universo carcelario a los maquis antifranquistas que actuaron hasta los años 1970, su arma principal ha vuelto a ser la pluma. Escritor prolífico (publica más o menos un libro al año), su combate parece dirigirse ahora a la necesidad de la transmisión, tanto de los acontecimientos como de su análisis. Por tanto escenifica personajes olvidados o voluntariamente ignorados por la historia oficial, la de los ganadores y de los poderosos, y nos inyecta dosis de recuerdos de hechos que demasiados de nosotros hemos olvidado.
De Jann-Marc Rouillan:
- Odio las mañanas. Ed. Llaüt (2001).
- Paul de Epinettes o la mixomatosis panóptica. Ed. Pepitas de calabaza (2008).
En relación:
- El MIL : una historia política. Sergi Rosés Cordovilla (Ed. Alikornio, 2002).
- Un esbozo de una historia del MIL. Sergi Rosés Cordovilla (una especie de resúmen del anterior).
- Por la memoria anticapitalista. Diversos autores (Ed. Klinamen). Contiene una cronología de AD y un texto de Jean-Marc Rouillan sobre el periodo del MIL.
- El MIL, Puig Antich y los GARI, 1969-1975. Telesforo Tajuelo (Ed. Ruedo Iberico, 1977).

Documental:
- Ni viejos, ni traidores (de Pierre Carles y Georges Minangoys, estado francés, 2005).

Película:
- La fuga de Segovia (de Imanol Uribe, Euskal Herria, 1981).

Página web:
http://www.mil-gac.info/. Página catalogando buena parte de los textos del MIL y otros, del periodo que va de 1970 a 1976. Trilingüe: castellano, catalán y francés.

No hay comentarios:

Publicar un comentario