Doncs que al 2010 hi hagueren disturbis a varis països europeus protestant per les reformes laborals i la precarització de les nostres vides- ací no. En canvi no hi hagué un moviment contracultural que ens va fer estancar-nos en pensament, estética, estils musicals, etc que sí hi hagué al 77. I ahí estem al 77 i no al 2011 que es on deuríem estar.
Esa es una buena forma de mezclar churras con merinas...los disturbios también se practicaban en el 77 y mucho antes también, y también se ha demostrado que no sirven para nada, fíjate que estancamiento más tonto...
Yo no sé cuando se han demostrado que no sirven para nada. Sino todo lo contrario; hacer conciertos y más y más conciertos no sirve para nada. En cambio enfrentamientos, okupaciones, y demás medidas de presión han sido las herramientas que han hecho cambiar las cosas.
La política sí que sirve para cambiar las cosas. La política institucional puede no servir para cambiarlas como yo quiero. Hay que ir disolviendo la institución, quizá desde dentro, quizá si la institución propone la desregularización, quizá así se vaya disolviendo la propia institución y devolviendo el poder al individuo, y la consciencia de la necesidad de solidarizarse con su vecina, con su entorno. Eso, o todas al monte. Si al menos el dinero sirviese para comprar puestos ideológicos... pero si es para gastarse más dinero, para generar intermediarios en el consumo, si se necesita una noche de conciertos, para financiar un festival de más conciertos, donde al cabo de unos años aparecerán dos grupos caros, y con suerte uno esté vinculado a un partido de "izquierdas", que con suerte, por ir haciendo mítines en festivales, consiga el apoyo necesario para ganar unas elecciones... entonces está claro que el Sistema es lo único que se perpetua con esas acciones.
La producción cultural también participa de los excesos de producción del Sistema, quizá deberíamos dejar de valorarla tanto. Cultura libre, sí, gratuita, sí, no subvencionada (y eso ya cuesta), pero venga, a ver si vamos cayendo en la cuenta de que tanta música, tanta película, tanta serie, tanto libro, tanto cuadro, tanto verso, tanta cultura, en realidad es toda la cultura del Sistema, del que no se libra ni la pipa del Subcomandante
Aquest cartell si que mola, ostia!
ResponderEliminarPor ahora todo va bien....
El 77 ja va passar...
ResponderEliminarY el 2010 també, i qué?
ResponderEliminarDoncs que al 2010 hi hagueren disturbis a varis països europeus protestant per les reformes laborals i la precarització de les nostres vides- ací no. En canvi no hi hagué un moviment contracultural que ens va fer estancar-nos en pensament, estética, estils musicals, etc que sí hi hagué al 77. I ahí estem al 77 i no al 2011 que es on deuríem estar.
ResponderEliminarEsa es una buena forma de mezclar churras con merinas...los disturbios también se practicaban en el 77 y mucho antes también, y también se ha demostrado que no sirven para nada, fíjate que estancamiento más tonto...
ResponderEliminarYo no sé cuando se han demostrado que no sirven para nada. Sino todo lo contrario; hacer conciertos y más y más conciertos no sirve para nada. En cambio enfrentamientos, okupaciones, y demás medidas de presión han sido las herramientas que han hecho cambiar las cosas.
ResponderEliminar...mas y mas conciertos sirven para cubrir a la gente que utiliza estas herramientas...
ResponderEliminarValencia is not Atenas
ResponderEliminarLa política no sirve para cambiar las cosas, tome la forma de conciertos o de manifestaciones...
ResponderEliminarLa política sí que sirve para cambiar las cosas. La política institucional puede no servir para cambiarlas como yo quiero. Hay que ir disolviendo la institución, quizá desde dentro, quizá si la institución propone la desregularización, quizá así se vaya disolviendo la propia institución y devolviendo el poder al individuo, y la consciencia de la necesidad de solidarizarse con su vecina, con su entorno. Eso, o todas al monte. Si al menos el dinero sirviese para comprar puestos ideológicos... pero si es para gastarse más dinero, para generar intermediarios en el consumo, si se necesita una noche de conciertos, para financiar un festival de más conciertos, donde al cabo de unos años aparecerán dos grupos caros, y con suerte uno esté vinculado a un partido de "izquierdas", que con suerte, por ir haciendo mítines en festivales, consiga el apoyo necesario para ganar unas elecciones... entonces está claro que el Sistema es lo único que se perpetua con esas acciones.
ResponderEliminarLa producción cultural también participa de los excesos de producción del Sistema, quizá deberíamos dejar de valorarla tanto. Cultura libre, sí, gratuita, sí, no subvencionada (y eso ya cuesta), pero venga, a ver si vamos cayendo en la cuenta de que tanta música, tanta película, tanta serie, tanto libro, tanto cuadro, tanto verso, tanta cultura, en realidad es toda la cultura del Sistema, del que no se libra ni la pipa del Subcomandante
ResponderEliminarCon los políticos es probable que no cambiemos nada, pero sin la política no vamos a niguna parte. Son cosas diferentes.
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