El llamamiento a la movilización contra las macrocárceles fue respaldado días antes por una amplia representación de colectivos sociales, agentes sindicales y partidos políticos, y así quedó de manifiesto ayer. «Tenemos razones de sobra para unir fuerzas ante esta situación de imposición total de los políticos y empresas que se benefician de este `progreso'», afirmaron los convocantes después de manifestarse por las calles del centro de Gasteiz.
(Relacionado: Contra el endurecimiento de las penas, artículo aparecido en El País)
Zuriñe ETXEBERRIA |
Las calles de Gasteiz albergaron ayer cientos de voces que se manifestaron en contra de las macrocárceles. La marcha, que comenzó sobre las 19.15, había sido convocada por la Plataforma contra las Macrocárceles, Sal- haketa, Añanako Inurriak, Ekologistak Martxan, Gizabidea, Etxerat y Autodefentsa. Representantes de estos colectivos fueron los encargados de portar la pancarta en la que se podía leer: «Makroespetxeen aurka. Ez Zabaian, ez Zubietan, ez inon». Asimismo, fueron muchos los colectivos, asociaciones y sindicatos que mostraron su apoyo.
La construcción de la macrocárcel de Zabaia «va viento en popa» y «queremos que se vea en la calle nuestra exposición», declaró Marta Aldanondo minutos antes de que arrancara la marcha a la que se sumaron alrededor de 400 personas.
«No responde ni a un modelo penitenciario acorde con las necesidades de Araba, ni respeta el medio ecológico», prosiguió Aldanondo, en nombre de la plataforma contraria a la construcción de este tipo de centros penales, que en el caso de Zabaia podría albergar a 1.752 personas hacinadas en 848 celdas.
Sobre la sentencia que el Tribunal Supremo español debe emitir en torno a la denuncia interpuesta por haberse iniciado las obras sin una evaluación de impacto medioambiental, Aldanondo se quejó de la tardanza y censuró que «a este paso la sentencia llegará cuando la cárcel ya esté construida».
«Imposición total»
Tras recorrer las calles céntricas de la capital alavesa, los manifestantes -entre gritos como «La cárcel no reinserta, extermina» o «Abajo los muros de las prisiones»- llegaron a la plaza de Correos, donde se dio lectura al manifiesto.
«La construcción de las macrocárceles es el exponente por excelencia del control y la represión, además de ser otro de los proyectos dañinos para la tierra», reseñaron en el comunicado. Asimismo, afirmaron tener razones «de sobra» para unir fuerzas «ante esta situación de imposición total de los políticos y empresas que se benefician de este `progreso'».
Gara
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