25, 26 y 27 de enero: Juicio de la revuelta que prendió fuego al centro de internamiento de Vincennes. 13:30, TGI París, 16ª cámara, parada de Metro: Cité
La revuelta que llevó a la quema de la mayor cárcel para extrangeros de Francia es una respuesta concreta e histórica a la existencia de centros de internamiento y a la política general de control de los flujos migratorios.
El 25, 26 y 27 de enero de 2010 en el TGI de París (Parada Cité) 10 personas serán juzgadas por esta revuelta.
Nuestra solidaridad debe estar a la altura del desafío: la liberación de los inculpados y más allá, la libertad de circulación y establecimiento.
En junio 22 de 2008, el mayor centro de internamiento de Francia ardió.
Entre junio de 2008 y junio de 2009, una decena de antiguos internos fueron arrestados y detenidos - en su mayoría durante casi un año – en detención preventiva. Están acusados de degradación, destrucción del centro de internamiento de Vincennes y/o de violencia en contra de la policía.
Durante los seis meses anteriores al incendio, el centro de internamiento de Vincennes fue el lugar de constantes protestas por parte de los sin papeles encerrados. Huelgas de hambre, inicios de incendios, rechazo de ser contado, altercados con la policía, oposiciones individuales o colectivas, se succedieron en el centro durante este período. En el exterior, manifestaciones y acciones denunciaron la existencia de tales centros y apoyaron las revueltas.
El 21 de junio de 2008, Salem Souli murió en su habitación después de haber pedido atención médica sin exito. Al día siguiente, una marcha organizada por los internos en memoria de este hombre fue violentamente reprimida. Una rebelión colectiva estalló, y el centro de internamiento empezó a arder.
Un juicio para dar ejemplo
Para evitar la propagación de este tipo de revuelta, el Estado debe ser duro, debe encontrar a los responsables. Estas diez personas se han escogido como un ejemplo. Si son "culpables" o "inocentes" no importa. El estado, castigando a estas personas, quiere ver desaparecer desafío, la rebeldía, los actos de resistencia de aquellos que están o estarán un día entre las cuatro paredes de esos centros.
La revuelta de Vincennes no es aislada. Dondequiera que haya un centro de internamiento, las revueltas estallan, empiezan incendios, fugas, huelgas de hambre, motines, destrucción. Este fue el caso en Francia (Nantes, Burdeos, Toulouse, donde varios centros fueron quemados) y en muchos países europeos (Italia, Bélgica, Holanda, Gran Bretaña) o en países donde el control de la frontera es subcontratado, como Turquía y Libia. El incendio del centro de internamiento de Vincennes no es sólo simbólico: la desaparición de las 280 plazas del centro tuvo como consecuencia inmediata una reducción significativa en las redadas y los desalojos en la
región de París durante el período que siguió. Concretamente se han evitado miles de detenciones. Por este acto, los internos detuvieron por un tiempo el funcionamiento de la máquina de expulsar.
Prisión para los extranjeros: encerrar, expulsar, disuadir de emigrar
Los centros de internamiento son una de las etapas entre la detención y la expulsión. Se usan para encerrar a los extranjeros el tiempo necesario para reunir todas las condiciones para la expulsión, es decir, un pasaporte o salvoconducto expedido por el consulado y un lugar en un avión o en un barco.
Cuanto más un Estado trata de expulsar, más centros de internamiento son construidos.
En todas partes, su número sigue en aumento. En Europa, la tendencia es a alargar el tiempo de reclusión, lo que no sólo permite que se pueda expulsar más, sino también disuadir de la inmigración.
De hecho, estos lugares de reclusión son lugares de castigo. Así, cada vez se construyen más según el modelo carceral: CCTV, unidades pequeñas, aisladores ... Por ejemplo, el centro de internamiento más grande de Francia en construcción en Mesnil-Amelot (240 plazas), que se inaugurará en pocas semanas está diseñado según este modelo. En Holanda, donde los suicidios y las muertes " Inexplicables" son frecuentes en los centros, la detención dura 18 meses y puede ser renovada inmediatamente después de la liberación; el internamiento tiene lugar en células individuales muy pequeñas, a veces, en buques-prisión, con muy poco acceso al aire
exterior.
Sin papeles: la mano de obra a medida ...
Los centros de internamiento son parte de la política de "gestión de la migración" que se desarrolló de acuerdo a los criterios" de inmigración selectiva ", es decir, en términos de necesidades de mano de obra de los países europeos. No es nada nuevo que los patrones de los países ricos utilicen a los trabajadores inmigrantes para aumentar sus beneficios. Ya sea legalmente como en el caso del antiguo “contrato OMI” (que permite alinear el derecho de presencia en el territorio durante el tiempo del trabajo de temporada) o del trabajo en negro, los extranjeros a menudo ocupan puestos de trabajo en los sectores más duros (construcción,
restauración, limpieza, trabajo de temporada ...). Estas industrias requieren una mano de obra flexible, adaptable a las necesidades inmediatas de la producción.
Además de la falta de derechos vinculados a su condición, por ejemplo, en caso de accidente, la constante amenaza de detención y deportación bajo la que viven los sin papeles, obviamente permite a los patrones pagar insuficientemente o no pagar nada en absoluto (lo cual no es poco común).
Esta nivelación por lo bajo de salarios y condiciones de trabajo permite a los empresarios aumentar la explotación de todos. Las huelgas repetidas de sin papeles muestran cómo los patrones franceses y el Estado necesitan de esta mano de obra, pero también cómo gracias a la organización colectiva, los sin papeles pueden a veces hacerles frente y obtener la
regularización.
...el chivo expiatorio ideal
La política de migración, de la que los centros de internamiento son una pieza, también sirve para estigmatizar a los sin papeles. El Estado los convierte en chivos expiatorios de las dificultades que enfrenta la población de Francia. El uso espectacular de las expulsiones por el Estado participa en la demostración tanto del grado de "peligro" que la inmigración irregular representaría para Francia y Europa, como la eficacia de un Estado que protegería a sus ciudadanos contra este peligro.
El Estado utiliza trucos como "las amenazas de la inmigración ilegal", la "escoria de los suburbios", las "mujeres con velo" o como la campaña sobre la identidad nacional, para enfatizar las ideas más xenófobas y racistas e intentar crear un consenso acerca del poder y del mundo que este produce.
Fronteras por todas partes
Los centros de internamiento son una elemento indispensable para la aplicación de una política europea de control de los flujos migratorios que, intenando suprimir las fronteras dentro del espacio Schengen, las refuerza en el exterior sobretodo con el dispositivo Frontex.
Por lo tanto, se subcontrata a las puertas de Europa, en acuerdo con países como Libia, Mauritania, Turquía, Ucrania, donde se financian campamentos para encarcelar a extranjeros
decretados indeseables, incluso antes de que hayan conseguido penetrar en Europa.
Al mismo tiempo, dentro de ese territorio, las fronteras se diseminan, se vuelven móviles y, por tanto, omnipresentes: cada control de identidad puede llevar a la expulsión. Porque la frontera no es una línea de demarcación del territorio, es sobretodo un punto de control, de presión y
de selección. Así, la calle, el transporte público, las administraciones, los bancos, las agencias de trabajo temporal, ya están actuando como fronteras.
Los centros de internamiento, como todos los campamentos de immigrantes, son parte de las fronteras asesinas de la Europa de Schengen. Son lugares en los que uno espera, encerrado, a veces indefinidamente y sin juicio, donde la gente muere por falta de atención, donde la gente se quita la vida antes que ser expulsado. Hay que terminar con las fronteras!
Por todas estas razones, y porque no hay "buena" gestión de la immigración, porque todo el mundo tiene que poder decidir dónde quiere vivir, Apoyamos a los inculpados de la revuelta y del incendio en el centro de internamiento de Vincennes!
ABSOLUCIÓN DE TODOS LOS INCULPADOS!
LIBERTAD DE CIRCULACIÓN Y DE INSTALACIÓN!
CIERRE DE LOS CENTROS DE INTERNAMIENTO!
NO MÁS DOCUMENTOS!
SEMANA DE SOLIDARIDAD DEL 16 AL 24 DE ENERO de 2010.
1 ª cita el 16 de enero de 2010: Proyecciones, Debates, Informaciones a las 19h en el CICP (21 calle Voltaire, París 11)
Colectivo de solidaridad con los acusados de Vincennes
liberte-sans-retenue@riseup.net
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